El espesor de la luz

Tiene espesor lo que tiene volumen, tiene volumen lo que genera sombra. La sombra nace de la luz y la luz crea volúmenes definiendo los espacios.

Los espacios adquieren personalidad en función de cómo los invade la luz; a menudo los espacios han sido inventados justo en función de la luz: el pronao, los pórticos, las galerías. Una fachada porticada durante el día esconde su pórtico bajo una franja, para después revelarlo solo cuando se encienden las luces nocturnas.

PR 16.64 terra soffittoLa luz ayuda a descubrir y leer la arquitectura. Porque la luz también es materia y debe tratarse como tal: tiene volumen, peso, espesor. Un espesor no directamente perceptible, sino  a través de la profundidad de los cuerpos sobre los que se apoya.

Se trata de un espesor importante porque es profundo, pero impalpable, voluminoso, y al mismo tiempo inconsistente; el medio fuerte que por contraste con el débil se convierte en fuertísimo.

En mi proyecto escondo un cuerpo de iluminación detrás de un agujero del techo, en la pared, haciendo que resulte invisible, pero devolviéndole su función primaria: hacer luz.

Creo el espesor infinito del rayo que baja sobre el ábside en el fondo de la nave; el espesor infinitesimal de una página escrita e iluminada bajo nuestros ojos.

Es la consistencia y la inconsistencia de los espacios.

8 reglas de la luz.

 ‘form m’ Mario Nanni