Iluminación, luz y su influencia en la arquitectura

La luz ha sido desde el principio de los tiempos una obsesión para el ser humano. La arquitectura no ha podido o no ha sabido escapar de ella, dando desde tiempos inmemoriales un valor único a la iluminación.

La arquitectura ha sido creada por el hombre con un doble sentido de practicidad y visión, es decir, que la arquitectura, además de ser usada, ha de ser vista. Visión y arquitectura son dos principios que nacen juntos y se desarrollan a la vez.

Todos los principios de la arquitectura están sujetos a la vista, al individuo y a la forma que éste tenga de apreciar cada una de sus líneas y formas. Nuestros ojos ven, pero hay diferentes formas de ver un mismo objeto.

Por eso, la arquitectura ha jugado desde siempre con la luz y el punto de vista de los individuos a la hora de crear, convirtiéndose en algo subjetivo y variable.

La vista nos provoca emociones, sensaciones que dependen de nuestro estado de ánimo pero también de cómo vemos lo que estamos viendo. Por eso, cualquier pieza arquitectónica cuenta con una visión psicológica, personalidad propia y emociones, un ámbito sociológico, valores y culturas, y un espacio para el lenguaje, comunicación y discurso.

Lo personal y el contexto

Todo esto influye en nuestros ojos y en la forma que tenemos de apreciar todo lo que nos envuelve.

La visión, por tanto, está empapada de lo personal y del contexto. Es así que cuando vemos, varios son los aspectos que influyen en nuestra visión.

Si nos centramos en la luz como factor clave, varios aspectos influyen al ojo humano en este proceso. La acomodación, es decir, la forma en que el ojo se adapta a variables como la distancia o el enfoque, sería el primero de los factores que relacionan la vista con la luz.

Este primer factor está relacionado con el cristalino, una pequeña lente que funciona como el objetivo de una cámara fotográfica profesional. Esto permite al ojo adaptarse, el segundo de los factores, a los diferentes niveles de iluminación. Con una iluminación baja nuestro iris y nuestra pupila se abren para conseguir una mejor visión de lo que estemos observando.

Por último, dentro de los factores que influyen en la forma que tenemos de apreciar lo que nos rodea, encontramos la agudeza visual. Gracias a esta capacidad del ojo humano, conseguimos discriminar y aceptar aquello que estamos observando.

Luz y confort visual

La luz y el confort visual tienen que estar siempre presentes en cualquier obra arquitectónica.

Cuando nos referimos al confort visual, intentamos entender que dentro de nuestro campo de visión tendemos a buscar la armonía y el equilibrio. Estas variables están relacionadas con la luz natural sobre la artificial, así como su intensidad y su cantidad.

Conseguir este confort es una muestra de arquitectura perfecta. Saber jugar con estas variables puede hacer que un espacio o una obra se conviertan en lugares únicos, perfectos para la comprensión del ojo humano. Algunos ejemplos claros de esta idea serían las formas que alcanzan los edificios góticos o la nueva arquitectura que tiende hacia lo natural y formal.

Por tanto, cuando nos acercamos a cualquier obra relacionada con la arquitectura, varios son los factores que afectan nuestra visión. La vista, la luz con la que se ha dispuesto el espacio o nuestras propias emociones son solo algunas de las claves para entender la idea arquitectónica en su conjunto.

El papel de la arquitectura

Para abordar este tema, el arquitecto ha de conocer a la perfección cuáles son las variables a las que se debe enfrentar para sorprender y dinamizar cualquier espacio que busque la sorpresa, la relajación o el simple disfrute del hecho arquitectónico.

la luminotécnica es un ciencia exacta, pero compuesta muchas veces por aplicaciones empíricas. solo experimentado se llega a una aplicación satisfactoria: es por lo que se habla de proyección y no de cálculo.

El cálculo es comprobación, control, es aquella parte de trabajo que llega en un segundo momento, casi para comprobar la primera fase. Es la parte más matemática, física, que da la posibilidad de analizar determinados espacios, medidas, intensidades.

Pero es sucesiva porque la ideación no nace solo del control. Una buena proyección, sugiere una pluralidad de comportamientos humanos.

 ‘form m’ MarioNanni

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